Desde que se borró mi blog por un accidente ya me había dado flojera iniciarlo de nuevo, pero hoy sentí una cosquillita de volver a hacerlo, no se porqué, ni siquiera tengo algo importante que decir, pero aquí estoy de necia, es casi como empezar un nuevo romance.
También me embarqué en la gran tarea de ordenar mis libros, supongo que estoy haciendo todo esto porque tengo un poco de tiempo libre, pero lo de ordenar los libros es una tarea titánica, los saqué todos de los estantes para sacudir bien y encontré cantidad de polvo que no parecía haber y una que otra araña sorprendida, ahora el volver a poner los libros me va a llevar una eternidad, no creo terminar ni en una semana, y es que hay libros de mi papá, de mi mamá, de mi abuelo y hasta del bisabuelo, claro, ahora todos son mios, pero no del todo, siguen teniendo esa otra pertenencia anterior.
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